Diego Aguirre: de perder las finales con Liverpool en 2023 al Peñarol campeón 2024
- 03/12/24
- Andrés López
Cuando Diego Aguirre asumió la dirección técnica de Peñarol en 2023, lo hizo bajo una sombra de dudas tras haber perdido el título con Liverpool en solo siete partidos. Sin embargo, lo que vendría en 2024 fue una verdadera revolución. Aguirre no solo reestructuró el plantel, sino que imprimió en él los valores más arraigados en la historia aurinegra: sacrificio, garra y gloria. Este es el relato de cómo Aguirre transformó a Peñarol en el equipo campeón que dominó el fútbol uruguayo.
Borrón y cuenta nueva: renovación del plantel
Las primeras palabras de Aguirre tras perder con Liverpool fueron claras: "Quiero un equipo que se identifique con la gente". Para lograrlo, implementó cambios drásticos. De Peñarol se marcharon figuras como Matías Arezo, Abel Hernández y Sebastián Rodríguez, junto con otros nombres importantes. La premisa fue clara: jugadores jóvenes, sanos y con rodaje. Así llegaron Javier "Cangrejo" Cabrera, Maximiliano Silvera y Eduardo Darias, quienes, lejos de las luces de los grandes nombres, aportaron dinamismo y compromiso.
Leo Fernández se convirtió en la gran figura ofensiva, cerrando la temporada con 16 goles en 33 partidos, mientras que Facundo Batista y Maximiliano Silvera complementaron el ataque con sus goles clave. Aguirre apostó también por la cantera, dando oportunidades a jóvenes como Germán Barbas y Tomás Olase, reafirmando su convicción por integrar a los juveniles en el plantel principal.
Cambios estructurales: un nuevo Peñarol
Aguirre no solo reformó el plantel, sino también la estructura del club. Una de las decisiones más simbólicas fue la salida de Edgardo Rienzi como jefe de la sanidad tras 74 años, dando paso a una nueva era con Daniel Zarrillo. Además, Peñarol incorporó un departamento de datos liderado por Agustín Alayes, un cambio que marcó un nuevo enfoque en la gestión deportiva.
Con un ojo crítico y detallista, Aguirre supervisó la reforma de Los Aromos y la Ciudad Deportiva Néstor Gonçalves, asegurando que cada espacio estuviera alineado con las necesidades del equipo. Su cercanía con los trabajadores y su humildad quedaron demostradas en cada paso, consolidando un liderazgo que trascendió lo futbolístico.
El resultado: un Peñarol histórico
Peñarol cerró la temporada 2024 como campeón del Apertura, del Clausura y del Uruguayo sin necesidad de jugar finales, algo inédito desde 1994. Con 93 puntos, marcó un récord de puntos en una temporada y alcanzó las semifinales de la Copa Libertadores, consolidándose como uno de los mejores equipos del continente.
El liderazgo de Aguirre, su capacidad para absorber la presión y su compromiso con los valores históricos del club hicieron que Peñarol volviera a enamorar a sus hinchas. Al finalizar la temporada, el mensaje fue claro: "¡Vamos por la Sexta!".
Peñarol volvió a ser Peñarol. Y Diego Aguirre, el arquitecto detrás de este renacer, ya es parte de la historia grande del club.